Es un hecho, lo que se presentaba como un rumor desde hace muchos meses ha concluido en pura realidad. Sony ha comprado por 1050 millones de euros el resto de la sociedad que tenia con Ericsson. Desde ahora Sony Ericsson pasa a manos solamente de Sony.
El negocio de la telefonía no es algo circunstancial para ninguna marca y Sony sabía que tarde o temprano debía dar el paso y hacerse con el 50% que le quedaba por adquirir de la join venture que formaba con Ericsson.
La compra de Ericsson por parte de Sony no solo afecta a la división de teléfonos móviles sino que lleva asociado un paquete de patentes y propiedad intelectual muy importantes para los japoneses, que se lanzarán a buscar más y mejor conectividad en diferentes plataformas, con sus televisores, tablets y teléfonos a la cabeza.
Tras diez años siendo Sony Ericsson, la aventura compartida llega a su fin y habrá que ver qué resultados para el consumidor tiene a corto plazo. Quizás el cambio de nombre de los teléfonos sea una de ellos, aunque la marca Sony Ericsson ya se ha afianzado y tienee buen reconocimiento.
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